Aire acondicionado

El aire acondicionado asegura que el aire del interior del coche sea fresco y confortable en verano. Pero quizá no sepas que también garantiza que el parabrisas se desempañe eficazmente en invierno y que el interior esté libre de polen y malos olores. Por eso debes revisarlo como cualquier otro componente de mantenimiento habitual en tu coche.

Consejo: Para prolongar la vida del aire acondicionado, es importante hacerlo funcionar por lo menos 15 minutos al mes. Incluso en invierno.

Una de las situaciones más comunes cuando cambian las temperaturas es que el sistema de aire acondicionado no funcione como es debido. La causa más frecuente en este tipo de casos es que se haya perdido parte del gas refrigerante del circuito del aire. Para salir de dudas y averiguar qué es lo que sucede, puedes traernos tu coche a Midauto para que nuestros profesionales comprueben la raíz de tu problema. El proceso de carga es un proceso de recuperación del gas y aceite antiguo para su reciclado, extracción de la humedad, control de estanqueidad, carga de gas con su aceite nuevo y finalmente el control de rendimiento. Si te preguntas por qué hay que cargar el aire acondicionado de nuestro coche, es porque ocurre igual que un neumático. Con el paso del tiempo una rueda pierde presión. En este caso, el circuito puede perder gas progresivamente. El gas utilizado comúnmente es el R134A. Éste sustituyó al R12, que era el que se utilizaba previamente pero que se dejó de emplear por su efecto negativo en el medio ambiente. A partir del 2.018, los vehículos nuevos incorporan el R1234YF, que emite menos gases de efecto invernadero a la atmósfera, siempre con el objetivo en mente de cuidar mejor nuestro planeta. En Midauto tienes la posibilidad de realizar la carga de aire acondicionado de tu coche de forma muy sencilla y al mejor precio. Además de la recarga del mismo, se realizará la comprobación del propio sistema para revisar que su estado sea el recomendado para su funcionamiento. Con su puesta en marcha nos aseguraremos de que el rendimiento es el adecuado para tu coche.

Debajo del vehículo es el lugar más habitual por el que puede gotear el aire acondicionado. El agua se condensa en el evaporador del aire acondicionado, que se encuentra dentro del habitáculo del coche. Esta condensación se drena a través de una manguera hacia la parte inferior del vehículo, donde cae al suelo en forma de gotas. Es normal observar un pequeño charco de agua debajo del coche después de usar el aire acondicionado, especialmente en climas húmedos o cálidos. Es completamente normal que el aire acondicionado de un coche gotee agua. Esto ocurre porque el sistema está diseñado para eliminar la humedad del aire interior. Cuando el aire caliente y húmedo del coche pasa por el evaporador, que es una parte fría del sistema, el vapor de agua se condensa en gotas. Estas gotas se acumulan en una bandeja de drenaje y luego salen del vehículo a través de un tubo. Así que, si ves agua debajo del coche después de usar el aire acondicionado, no te preocupes, es algo natural. Ahora, si no ves agua goteando en absoluto, podría significar que el tubo de drenaje está bloqueado, en ese caso, sería bueno realizar una revisión del aire acondicionado del coche para asegurarte de que todo está funcionando bien.

Por norma general no es malo para el motor arrancar el coche con el aire acondicionado encendido, pero sí puede tener ciertas consecuencias, como por ejemplo, una mayor consumo de la batería. Esto es dado porque el compresor del aire acondicionado del coche es un componente eléctrico que consume mucha energía. Al arrancar el coche, el motor de arranque ya está haciendo un esfuerzo considerable para poner en marcha el motor, si además se enciende el aire acondicionado, se aumenta la carga sobre la batería, lo que puede dificultar el arranque. Por tanto, si el aire acondicionado de tu coche está encendido, el motor tendrá que dedicar parte de su potencia a enfriar el habitáculo, lo que puede reducir la potencia disponible para el arranque.

La presión de trabajo de un sistema de aire acondicionado de un coche puede variar dependiendo del tipo de refrigerante utilizado y las condiciones de operación. Sin embargo, aquí están algunos rangos típicos de presiones de operación para sistemas de aire acondicionado para coche:

Refrigerante R465a / R-134a:

Presión del lado de baja (baja presión): aproximadamente de 25 a 45 psi (libras por pulgada cuadrada) en condiciones normales de funcionamiento.

Presión del lado de alta (alta presión): puede variar entre 150 a 250 psi, aunque puede llegar a ser más alta en condiciones extremas o cuando el sistema está muy cargado.

Refrigerante R-1234yf (más nuevo y ecológico):

Presión del lado de baja: similar al R-134a y al R465A, generalmente entre 25 y 45 psi.

Presión del lado de alta: también similar, típicamente entre 150 y 250 psi, pero puede variar.

Es importante tener en cuenta que estas presiones pueden fluctuar según la temperatura ambiente, la carga del sistema, y la eficiencia del compresor. También, estas medidas son generales y pueden variar según el modelo del coche y el diseño específico del sistema de aire acondicionado de coche.

Por lo que recomendamos realizar un diagnóstico de aire acondicionado con expertos y en Midauto estaremos encantados de recibirte, siempre.

La temperatura del aire que sale de las rejillas del aire acondicionado de un coche puede variar dependiendo de varios factores como la temperatura exterior, la configuración del sistema, y el nivel de carga del refrigerante. Sin embargo, hay algunos rangos típicos que se consideran normales:

Rango óptimo de temperatura: Entre 7°C y 10°C (45°F y 50°F) se considera un rendimiento óptimo en muchas condiciones.

Temperatura aceptable: Hasta 15°C (59°F) puede ser aceptable en condiciones extremas de alta temperatura exterior. Estos rangos son aproximados y pueden variar ligeramente según el modelo del coche, el diseño del sistema de aire acondicionado de tu coche y el estado de mantenimiento del mismo. Si el aire acondicionado no está enfriando adecuadamente puede ser una señal de que el sistema necesita servicio, como una recarga de aire acondicionado o una revisión de componentes como el compresor, el condensador o el evaporado.

Cuando ves humo saliendo del aire acondicionado de tu coche, puede ser alarmante, pero generalmente, hay explicaciones que no son necesariamente motivo de preocupación. Lo más común es que lo que parece humo sea vapor de agua, esto sucede especialmente en condiciones de alta humedad. Cuando el aire caliente y húmedo del exterior se enfría rápidamente al pasar por el evaporador del aire acondicionado, el vapor de agua se condensa y puede darnos la sensación de que se trata de humo. Este vapor es inofensivo y es solo una señal de que el sistema de aire acondicionado está funcionando correctamente. Otra posibilidad es que haya una pequeña fuga en el sistema de refrigeración. Si el refrigerante se escapa y se mezcla con el aire caliente, puede formar una niebla parecida al humo. En este caso, es importante hacer una revisión del aire acondicionado del coche, ya que las fugas de refrigerante pueden influir en el rendimiento del aire acondicionado y son perjudiciales para el medio ambiente.

En algunos casos, puede salir humo del aire acondicionado del coche, este humo puede ser debido a la acumulación de polvo o suciedad en el sistema de ventilación. Cuando el aire acondicionado se enciende, esta suciedad puede calentarse y producir una ligera cantidad de humo o un olor a quemado. Es recomendable limpiar o reemplazar los filtros de aire acondicionado del coche regularmente para evitar esto. Si el humo tiene un olor extraño o desagradable, como a quemado o químico, podría ser una señal de un problema más serio, como un cortocircuito en el sistema eléctrico o un componente sobrecalentado. En este caso, deberías apagar el aire acondicionado inmediatamente y llevar el coche a un mecánico para una recarga del aire acondicionado del coche y revisarlo a detalle.